CERMI pide medidas contra la discriminación digital | Discapacidad e integración | Loentiendo

Las personas con discapacidad piden medidas contra la discriminación digital

El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) propone que se reconozca en la legislación española el derecho de todos a acceder a páginas web y aplicaciones móviles. 

Cuando Internet aleja a las personas

 
Las redes sociales, las aplicaciones móviles y las páginas web no suelen estar preparadas para que una persona con problemas auditivos, visuales, intelectuales o cualquier otro tipo de discapacidad física o sensorial puedan acceder y comunicarse a través de ellas. Esta realidad hace que muchas personas queden aisladas en el mundo digital y para evitarlo, la Unión Europea ha puesto en marcha medidas para garantizar el acceso a las plataformas digitales.

El pasado mes de diciembre de 2016 entró en vigor la Directiva (UE) 2016/2102 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 26 de octubre de 2016, sobre la accesibilidad de los sitios web y aplicaciones para dispositivos móviles de los organismos del sector público. Como indica esta norma, el objetivo es:

“Aproximar las disposiciones legales, reglamentarias y administrativas de los Estados miembros relativas a los requisitos de accesibilidad de los sitios web y aplicaciones para dispositivos móviles de los organismos del sector público, permitiendo así que dichos sitios y aplicaciones sean más accesibles para los usuarios, en particular para las personas con discapacidad”.

Tras la entrada en vigor de la directiva europea,  el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), que representa a más de 3 millones de personas y sus familias, ha propuesto que se adapte esta normativa europea a la legislación española. (En cualquier caso, España como país miembro de la Unión Europea tiene que adaptarla antes del 23 de septiembre de 2018 – lo que se conoce como transposición).

El Comité que representa a las personas con discapacidad considera que la medida que ha propuesto el Parlamento Europeo es un buen comienzo, aunque haya dejado fuera de su ámbito de aplicación a las páginas web y aplicaciones de empresas privadas, a pesar de que muchas de ellas ofrecen servicios básicos públicos (como, por ejemplo, los transportes, sanidad o suministros). Por ello, pide que España sí se refiera expresamente a este tipo de sitios web y aplicaciones y que todos ellas indiquen qué partes son accesibles. Asimismo, el CERMI solicita que se vaya actualizando el ordenamiento jurídico para que todas las personas puedan utilizar sin problemas los nuevos sistemas de comunicación que van apareciendo. De esta manera, no habría una barrera a la hora de poder gestionar un perfil en redes sociales, por ejemplo.

Con esta directiva no sólo las personas con una discapacidad podrán mejorar sus comunicaciones a través de la red y cualquier dispositivo móvil sino que también se facilita el acceso a las personas mayores, con dificultades de visión o audición, entre otras, para que la información sea más comprensible.

 

Tecnología y eliminación de barreras

 
Hemos visto en este artículo que las nuevas comunicaciones que utilizan el soporte digital pueden llegar a crear barreras si el sitio web en sí mismo no está preparado para que alguien con dificultades físicas, intelectuales o sensoriales acceda a la información. Sin embargo, las tecnologías también han facilitado que más personas con discapacidad puedan acceder a un puesto de trabajo, aprender o disfrutar de actividades de ocio y tener un mayor bienestar.

Los sistemas informáticos o electrónicos en dispositivos, ordenadores y mobiliario adaptado permiten que una persona pueda trabajar y relacionarse sin que haya barreras sociales. Por ejemplo, los licornios son una especie de cascos con un puntero que permite que una persona  pueda escribir en el ordenador, gracias a la orden que con su cerebro envía a ese puntero o varillas. También hay sensores y sistemas de reconocimiento de voz.

Aunque se haya ido mejorando en este sentido, aun queda como asignatura pendiente facilitar el acceso al mundo online sin necesidad de ningún aparato. Es decir, que pinchando en un determinado sitio web, todas las personas sin distinción puedan acceder a la información, por ejemplo, a través de audios para las personas que han perdido la visión o vídeos en lengua de signos que reproduzcan la información, si tienen dificultades auditivas.

En definitiva, si en el mundo real se han ido eliminando las barreras para que todas las personas puedan moverse por la ciudad y relacionarse,  el contenido digital  también debe ser lo más accesible posible.

 

Si te ha parecido útil, comparte este artículo